Robocop 2 es una castaña.

Por empezar por algún sitio y como en el programa aún no se ha tocado, al menos en profundiad, la trilogía sobre el futuro refuerzo de la ley, vamos a faltarle al respeto a la segunda entrega de la misma.
Porque somos muy de faltar.
Y muy de escribir lo que nos viene en gana.
Y porque la tenemos recién vista.
Bueno yo, GuZ, que soy el que escribe esta entrada.

Andaba yo recordando que Robocop 2 fue una de las películas que más me gustó en aquellos tiempos de la adolescencia y me preguntaba por qué hacía tanto tiempo que no la veía. La respuesta la hallé en mi vieja copia en VHS al ver que la cinta que contenía estaba rota.
O sea que se deduce que el reproductor se cargó la cinta y desde entonces, no le eché más cuentas a la película.
Y qué feliz era.
Cuando uno tiene una propensión de esas de hacérselo mirar al complejo de Diógenes relacionado con las frikadas, acaba olvidando que tiene cosas.
Una de esas cosas era la trilogía en DVD que me había comprado por cuatro perras en alguna web alemana o vaya usted a saber dónde para ajustar gastos de envío.
O porque había 3x2. 
O porque estaba borracho, no lo sé.
El caso es que ayer inserto el disco en el reproductor y me siento a rememorar momentos de la juventud.
Casi dos horas después, y habiendo tirado del ffw en más de una ocasión, me encuentro con una sensación de WTF? digna del regreso de Aznar.
Que los fx parezcan cutres 23 años después es totalmente lógico. Que sean más cutres que en la película anterior, no tanto.
Y con un presupuesto similar.
Pero bueno, que la stop motion no daba para más, vamos a perdonárselo.
Pero que la película acabe siendo aburrida, y abra frentes como el de la dicotomía de Murphy con su humanidad para (no) cerrarlos de un golpe e irse a otra cosa, ya es imperdonable.

Es fácil cargar las tintas contra Frank Miller, que en esta cinta hace su primera incursión en el mundillo del cine como guionista y tiene un cameo (demostrando que es un jrandísimo actor), pero por lo que que siempre se ha comentado, la culpa está lejos de ser suya. Al menos exclusivamente, porque el guión fue censurado, mutilado y empalmado de las peores de las maneras.

Frankie ya tenía cara de querer violar a tu hermana en 1982.

Aunque el supuesto Writer´s Cut que publicó años después Avatar Press en forma de cómic tampoco sea una maravilla del noveno arte.Y es que esta película fue hecha con prisas y corriendo para chupar del bote de la obra maestra de Verhoeven.
Y chupó, chupó  porque en taquilla no le fue nada mal y aún tuvieron tiempo de sacar una tercera parte antes de que Orion se fuese al carajo del todo.
Vamos que la película no es que haya envejecido mal, es que ya era mala pero a esas edades, lo que nos echaran.
La moraleja es: deja en paz los recuerdos.
A ver quien es el guapo que la sigue.